Hablo de autoconocimiento con relación a los sentidos que tenemos disponibles. Hablo de empatía hacia las personas que no tienen todos los sentidos disponibles. Hablo de que no hay persona más discapacitada de la que no es consciente de su potencial. Y este es un punto alentador que en función de la mirada podemos darnos cuenta del alcance...
A nivel micro; tu familia, tu pareja; complicidad, gozar, conocimiento personal, detalles.
A nivel meso; escuela, universidad, centro de salud, amistades; creación de lazos sociales, desarollo social, creación de red de protección extensa, ocio.
A nivel exo; trabajo, organización social, Servicios Públicos, empresa, movimiento social. Desarrollo como ciudadano pleno, como ciudadana plena. Red de protección social.
A nivel macro; políticas sociales, cultura y sociedad, tradiciones. Marco de actuación, organización social, garantías.
Pero, ¿y si la sociedad y la cultura estigmatiza a las personas con discapacidad, y sobretodo a las mujeres por la preconcepción cuidadora y reproductora? ¿Cómo llegar al punto de satisfacción de necesidades de carácter personal? ¿Cómo se vinculan los niveles si existen contradicciones macro que influyen directamente en la posibilidad de desarrollo individual?
Al lado un buen artículo sobre género y discapacidad: López, M. (2007). Discapacidad y género. Estudio etnográfico sobre mujeres discapacitadas. Educacion y diversidad. Education and diversity: Revista inter-universitaria de investigación sobre discapacidad e interculturalidad, (1), 137-172. |
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Conóceteme y empatízateme
Yo tengo ciertas limitaciones y precondiciones por ser hombre que pueden ser estresantes, también ventajas porque no se me cuestiona en todos los espacios. Sin embargo, soy consciente de mis debilidades y fortalezas y trato de actuar en consecuencia. Aunque aún podría profundizar más y hallar más respuestas para prevenirme y para potenciarme.
Lo que quiero decir con esto es que es importante conocernos, hacer un ejercicio introspectivo para poder lanzarnos con más herramientas a la intervención psicosocial o incluso a la relación con cualquier persona. Este ejercicio puede servir para empatizarnos con nuestra realidad, como actividad previa de empatización con el otro. Cuestión que sin duda es relevante cuando atendemos situaciones de discapacidad, género, migración especialmente. Además sirve de ejercicio de autosupervisión, aunque mejor será si lo compartes con colegas.
No pretendo extenderme más, ni seguir con el espoiler de la película...